Otro creería que la nave, al cortar con la proa la ola altanera, se va a precipitar en tan terrible viaje a los abismos. Pero allá dentro, invisible entre los mástiles, hay un marinero que sabe dirigir la nave.
La prosperidad del crimen es como el rayo, cuyos engañosos fuegos sólo embellecen un instante la atmósfera para precipitar en los abismos de la muerte al infeliz a quien han deslumbrado
Estar en contacto con científicos, llegar a ser de alguna manera un científico si era posible, tal vez arrojar nueva luz sobre los fenómenos físicos, ser capaz de descubrir lo que es real y definitivo, ese fue el gran sueño de mi vida
La mujer eléctrica nos aguarda a ti y a mí, así que es hora de emprender un viaje. Puedes arrojar todos tus complejos a la costa mientras sobrevolamos el mar lleno de amor.