El deseo de desaparecer, porque las cosas desaparecen, emponzoño tan atrozmente mi sed de ser que, en medio de los resplandores del tiempo, el aliento se apagaba y el ocaso de las naturaleza me envolvía con multitud de sombras. Y como veía el tiempo en todas las cosas, esperaba salvarlas del tiempo.
Durante las grabaciones de Innuendo en el ocaso de su vida atacado severamente por el SIDA dijo: escriban lo que sea que yo lo cantaré como nunca...
Ese camino sólo lo toma el crepúsculo en otoño.
La religión es el hada buena de la infancia, ese crepúsculo matinal de la vida. Ella encanta el cerebro y el corazón de los niños y puebla de dulces y tiernos recuerdos el espacio azul de los primeros días.
El arte de la pintura consiste en aclarar y oscurecer los tonos sin decorarlos.
El arte de la pintura consiste en aclarar y oscurecer los tonos sin decorarlos.