Yo diría aquí algo que escuché de un eclesiástico del grado más eminente, : La intención del Espíritu Santo es enseñarnos cómo se va al cielo, no cómo funcionan los cielos
Pero tampoco los mismos reyes advertían suficientemente qué precedente introducían en contra de sí mismos: que en lo sucesivo estuviera permitido a un sacerdote romano deponer de su trono a aquel príncipe que hubiera incurrido en su odio.
No me pongas al sacerdote en el trance de perder su gravedad. Es virtud que, sin envaramiento, necesita tener.
Esclavizarse por razón de política vale tanto como someterse por causa de religión: esclavos de una casaca o de una levita da lo mismo que siervo de una sotana o de un hábito.
Una copa de buen licor pondrá fin a una contienda más rápido que la justicia, el juez o el vicario
Yo diría aquí algo que escuché de un eclesiástico del grado más eminente, : La intención del Espíritu Santo es enseñarnos cómo se va al cielo, no cómo funcionan los cielos
Todos los conceptos de la Iglesia se hallan reconocidos como lo que son, como la más maligna superchería que existe, realizada con la finalidad de desvalorizar la naturaleza, los valores naturales; el sacerdote mismo se halla reconocido como lo que es, como la especie más peligrosa de parásito, como la auténtica araña venenosa de la vida...
...A partir de ahora todas las cosas de la vida están ordenadas de tal modo que el sacerdote resulta indispensable en todas partes, en todos los acontecimientos naturales de la vida, en el nacimiento, el matrimonio, la enfermedad, la muerte, para no hablar del sacrificio (la cena), aparece el parásito sagrado para desnaturalizarlos: dicho en su lenguaje, para santificarlos...
Esclavizarse por razón de política vale tanto como someterse por causa de religión: esclavos de una casaca o de una levita da lo mismo que siervo de una sotana o de un hábito.
Una copa de buen licor pondrá fin a una contienda más rápido que la justicia, el juez o el vicario