De haber escrito mi propio epitafio este hubiese sido: Tuve una riña de enamorados con el mundo.
Los pastusos deben ser aniquilados, y sus mujeres e hijos transportados a otra parte, dando a aquel país una colonia militar. De otro modo Colombia se acordará de los pastusos cuando haya el menor alboroto o embarazo, aún cuando sea de aquí a cien años, porque jamás se olvidarán de nuestros estragos aunque demasiado merecidos
Cuando ven a un hombre que piensa libremente, los clérigos arman un alboroto similar al de las gallinas que descubren entre sus polluelos a un patito que se lanza al agua. No piensan que algunos viven tan seguros en este elemento como ellos en seco.
Soy huérfano. Deambulo por el Dunsboro colonial con los pollos deformes de nacimiento, los ciudadanos drogadictos y los niños de la excursión que creen que este jaleo tiene algo que ver con el pasado real. Uno puede fingir. Uno puede engañarse, pero no se puede recrear lo que ya terminó.
A mí no me importa quién está en el gobierno, yo digo lo que tengo que decir. Si hace las cosas bien, no tengo que aplaudirlo porque para eso está. Yo critico lo mal que hace. Muchos me dicen que vivo tirando la bronca y que no veo lo positivo. Los que gobiernan se postularon para eso y tienen que hacerlo.
Es un lujo jugar con Puyol. Con 5-0 me sigue echando bronca aunque sea el último minuto del partido
Mis nuevas canciones son un poco más maduras. Ahora sé cómo manejar a los chicos. En realidad, ni siquiera me lío con los chicos, me lío con los hombres.
Había sido honrado, cabal como una escalera de póquer del as al cinco, hasta que se lió con la bofia. Se convirtió en uno de ellos. Su mujer agotó la paciencia y le abandonó.
La cosa con Michael es que es posiblemente, el artista más profesional, más talentoso con el que haya trabajado. Cuando todo el barullo esta despejado, cuando eso pasa, puedes tener 60 bailarines en frente de ti, y saber exactamente cual es Michael.
Prefiero el barullo de la prensa libre al silencio de las dictaduras
Cuando disecciono y destrozo a un animal vivo, oigo en mi interior al amargo reproche de que con una mano brutal y torpe estoy estropeando un mecanismo artístico incomparable
Si te enfrentas a Big L cogiste la cabeza equivocada. destrozo micrófonos como al pan de maíz, no se me puede destruir, yo nací muerto.
Si no tomamos conciencia del desastre ecológico que el hombre ha desatado en nuestro planeta las consecuencias serán terribles. (... ) Todos debemos comprometernos a luchar sin descanso por la rehabilitación del aire, el agua y la tierra.
Estamos especializados en una armoniosa repetición del desastre y la estupidez.
Terrible animal son veinte años. No hay batalla tan sangrienta ni tan trabada escaramuza como la que trae la mocedad consigo