No existe ningún hombre que tenga el derecho de despreciar a los hombres.
Y no logrará desprenderse jamás de su tosquedad y su ignorancia. Le he hecho todavía más vil de lo que su miserable padre quiso hacerme a mí. Le he acostumbrado a despreciar cuanto no es brutal, y llega al extremo de vanagloriarse de su rudeza.
Aléjate de aquellos que intentan menospreciar tus ambiciones. Gente pequeña siempre lo hace, pero los verdaderamente magníficos te hacen sentir que, tú también, puedes ser magnífico.
En la guerra, la fortuna es variable. Por eso, el guerrero prudente no debe menospreciar al enemigo.
El hecho de denigrar a los seres queridos es algo que siempre nos aparta un poco de ellos.
No voy a ofender más a nadie, y hay verdades que aprendí a evitarlas porque dichas de manera contundente, terminan ofendiendo.
Un maestro que permanece mudo cuando se enseña el error, y no obstante pretende ser un maestro de la verdad, es peor que un fanático descarado y con su hipocresía hace más daño que un hereje... éstos no quieren ofender a nadie, o decir una palabra en favor de Cristo, o combatir al diablo y al mundo
¿Qué ganarías con injuriar a una piedra que es incapaz de oírte? Pues bien, imita a la piedra y no oigas las injurias que te dirijan tus enemigos.
No se debe zaherir lo vulgar, pues eternamente perdura inmutable.
... hay igual o mayor bravura en dominarse a sí mismo que en asustar o agraviar al prójimo...
Un emprendedor no puede limitarse a jugar sobre seguro. Su mentalidad tiene que ser, necesariamente, la de asumir un gran riesgo. Si teme que, en un determinado momento, se le vaya a estigmatizar por un fallo, estará cometiendo una equivocación dramática
Lo peor no es cometer un error, sino tratar de justificarlo, en vez de aprovecharlo como aviso providencial de nuestra ligereza o ignorancia.
Ningún ingeniero ni químico ha pregonado tener la capacidad de producir un material que sea indistinguible de la piel humana. Es posible que se logre con el tiempo, pero aún en el supuesto de que existiese este invento, sabríamos lo poco importante que resulta tratar de hacer más humana a una máquina pensante cubriéndola con esta carne artificial.
Fue fácil pronosticar el fracaso absoluto de tan sabio gobierno, porque los hombres son estúpidos y prefieren cobijarse en los brazos de la esclavitud a pararse ante los vientos de la libertad y vivir de acuerdo con este difícil camino, y por su naturaleza prefieren robar que trabajar, dormir que vivir, comer que pensar, traicionar que ser fieles, deshonrar en lugar de honrar.
Se tiene el talento para honrarse con él, no para deshonrar a los demás.
He aprendido a no desdeñar lo que creen los demás, por raro que parezca. Procuro mantener un criterio abierto, y no son las cosas ordinarias de la vida las que podrían cerrármelo, sino las cosas extrañas, las cosas extraordinarias, las que le hacen dudar a uno si estará loco o en su sano juicio.
La teología es el pensamiento aplicado a la religión; y los que prefieren una religión sin pensamiento no tienen por qué desdeñar a los que tienen gustos más racionalistas
Todo el mundo, sin importar lo fanáticos que sean a la hora de difamar y luchar contra el capitalismo, implícitamente lo homenajean al demandar apasionadamente sus productos
Me preocupa que el ministro tenga esa actitud de energúmeno, donde sólo le importa desacreditar a Sobisch, rodeado de una banda de cuasi mafiosos.
Me llama la atención la energía que pone mucha gente en denostar la tecnología. ¿Para qué? Ya llegó, está aquí, usémosla en lo que nos conviene y listo, qué tanto perder el tiempo hablando de la vieja máquina de escribir.