Pobre juventud: ¡Qué fácil es naufragar! Dichoso aquel que estuvo en peligro entre el oleaje del mar y logró llegar a la orilla.
Conozco los secretos del alma del paisaje, y sé lo que entristece, y sé lo que consuela, y el viento traicionero y el bárbaro oleaje conocen la invencible firmeza de mi vela.