De haber escrito mi propio epitafio este hubiese sido: Tuve una riña de enamorados con el mundo.
A quienes no les gusta o les parece cruel una buena corrida o una buena pelea de gallos, la solución es muy sencilla: no vayan. Pero, qué tal la Feria de Cali sin toros o el Festival Vallenato sin gallos? ¡Y, por Dios!, no sigamos legislando como si viviéramos en Dinamarca.
No es sólo en la guerra, sin embargo, que peleamos por la libertad. Uno pelea por libertad en contactos personales y en muchas fases de la vida civil. Todo el tiempo, día a día, tenemos que continuar luchando por la libertad de religión, libertad de expresión y libertad de la pobreza, por todas aquellas cosas que deben ser ganadas en paz así como en la guerra.
Del camino del Go, la belleza de Japón y del Oriente se habían desvanecido. Todo se había vuelto ciencia y reglas. El camino hacia el ascenso de categoría, que controlaba la vida de un jugador, se había convertido en un meticuloso procedimiento de puntaje. Uno conducía el enfrentamiento con la única meta de ganar, y no había margen para recordar la dignidad y la fragancia del Go como arte.
Las verdaderas tragedias no resultan del enfrentamiento entre un derecho y una injusticia. Surgen del choque entre dos derechos.
La idea de un choque de civilizaciones es errónea y peligrosa.
La pólvora no explota sin estar comprimida; la cautividad ha reunido en un solo punto mis facultades y han entrado en contacto en un espacio reducido, y como no ignoráis, del choque de las nubes resulta la electricidad, de la electricidad el rayo, y del rayo la luz.
¿Quién es mejor, Raúl o Ronaldo? Para mí, Raúl. Lo tiene todo. Ronaldo te puede romper en una jugada, pero con Raúl son noventa minutos de lucha y movimiento, todo lo que hace lo hace bien. En este momento es mejor que Ronaldo aún cuando no juega muy bien. Aunque se diga que no está en racha, cuando el Madrid necesita alguien que tire, ahí está él. Lo ha hecho tantas veces...
Si bien debe existir una coordinación entre la lucha armada y las diversas formas de lucha política, la planificación global y la conducción estratégica de todas las formas de lucha deben estar en manos de la dirección combatiente.
Entre casados de honor, / cuando hay pleito descubierto / más vale el peor concierto / que no el divorcio mejor.
Si habrá crisis, bronca y hambre, que el que compra diez de fiambre hoy se morfa hasta el piolín.
A mí no me importa quién está en el gobierno, yo digo lo que tengo que decir. Si hace las cosas bien, no tengo que aplaudirlo porque para eso está. Yo critico lo mal que hace. Muchos me dicen que vivo tirando la bronca y que no veo lo positivo. Los que gobiernan se postularon para eso y tienen que hacerlo.
Confieso que no me entusiasma el ideal de vida que nos presentan aquellos que creen que el estado normal del hombre es luchar sin fin para salir de apuros, que esa refriega en la que todos pisan, se dan codazos y se aplastan, típica de la sociedad actual, sea el destino más deseable de la humanidad
El literato de puerta cerrada no sabe nada de la vida. La política, el amor, el problema económico, el desastre cordial de la esperanza, la refriega directa del hombre con los hombres, el drama menudo e inmediato de las fuerzas y las direcciones contrarias de la realidad, nada de esto sacude personalmente al escritor de puertas cerradas.
La cuestión es que el sexo no fue la parte de la pornografía que enganchó al niño estúpido. Fue la confianza. El valor. La falta total de verguenza. la comodidad y la sinceridad genuina. La franqueza que permitía a alguien ser capaz de salir allí y contarle al mundo: Sí, así es como yo decido pasar una tarde libre. Posando aquí con un mono metiéndome cacahuetes por el culo.
La vida es cruel. Nacer, existir, desaparecer, siempre la cuestión de la muerte. Que sea la enfermedad, a consecuencia de un accidente o en la guerra no cambia nada. En cuanto a los que sufren por la guerra, pueden encontrar un consuelo pensando que si se consiente su sacrificio es para asegurar el porvenir del pueblo del que forman parte.
Marxistas. Pero el concepto de anarquismo de los servicios estatales es un intento de aprovechar para el estado imperialista la vieja disputa entre el marxismo revolucionario y el anarquismo revolucionario. Mas, de acuerdo con esa falsa comprensión del marxismo, Lenin era anarquista y su obra Estado y Revolución sería un libro anarquista.
Las leyes de casi todos los países establecen reglas para decidir muchas cosas, no porque tenga mucha importancia de qué manera se deciden, sino para que se decidan de alguna forma y no pueda haber disputa sobre el asunto.
Si un escritor se considera revolucionario (y siempre todo verdadero escritor ha estado en pugna contra los órdenes sociales injustos), elegirá la lucha contra su medio ambiente, tratará de superarse y superarlo por todos los medios.
Confesar el mérito de otro es probar que uno lo tiene. Negarlo injustamente, prueba que no pudiendo uno elevarse, pugna por poner a todo el mundo a su nivel
Soy huérfano. Deambulo por el Dunsboro colonial con los pollos deformes de nacimiento, los ciudadanos drogadictos y los niños de la excursión que creen que este jaleo tiene algo que ver con el pasado real. Uno puede fingir. Uno puede engañarse, pero no se puede recrear lo que ya terminó.
Terrible animal son veinte años. No hay batalla tan sangrienta ni tan trabada escaramuza como la que trae la mocedad consigo