Al dar a las personas el poder de compartir, hemos hecho del mundo un lugar más transparente
La vida no se le aparecía como ese mar de olas tumultuosas que describen los poetas; se la representaba llana como un espejo, inmóvil, transparente hasta es sus oscuras profundidades.
Sé puro, diáfano y firme como un diamante, para que puedas ser valioso a los ojos de Dios.