Si en época normal hay un adagio que dice que es preferible absolver a cien culpables a castigar a un inocente, cuando está en peligro la vida de un pueblo, es preferible condenar a cien inocentes antes que el culpable pueda ser absuelto.
¿Por qué nadie tiene que condenar nada si no quiere?, y por eso no incurre en ningún delito, salvo si lo pone así la ley porque les da la gana.