El que la actitud de los primeros cristianos ante el Estado no sea acorde, sino que parece ser contradictoria, guarda relación con el concepto complejo de 'provisional'. Hago hincapié: parece ser así. Pensemos, por ejemplo, en Rom 13, 1: Sométase toda persona a las autoridades superiores; y junto a esto, el Apocalipsis de Juan 13, 1 y sigs, donde el Estado es la bestia que sale del abismo
Cuando nos vemos al borde del abismo y parece que Dios nos ha abandonado, ya no vacilamos en esperar de él un milagro.
..., y considerando cuánta profundidad de filososofía moral se requiere en quienes suministran el poder soberano, estoy a punto de creer que esta labor más es tan inútil como la República de Platón.
Entre los tontos el vacío se parece a la profundidad. Para el que es vulgar, la profundidad es incomprensible. De ahí viene quizá la admiración del pueblo por todo aquello que no comprende
Contra la depresión emplea la vida al aire libre, la sobriedad, la selección de los manjares, la prudencia ante los licores, ninguna preocupación y control de las emociones.
Por lo general, aquellas cavilaciones no lo llevaban más que a encogerse de hombros y a desecharlas como algo carente de importancia, pero en los períodos de depresión profunda que a veces sufría, podía sentir todo el peso de su limitación y desesperar al saberse tan distinto del resto de la gente.
El culto hispánico religioso ha cedido paso a una nueva fe, en la que los sacerdotes emergen desde una cavidad subterránea y ofician con el pie
Los geólogos disfrutan con los terremotos y otras catástrofes naturales porque abren la tierra y dejan entrever sus secretos. Mi actitud hacia esta barcaza era similar. No había forma de sacarla a rastras de la isla y saltar dentro de la cavidad que había horadado, pero podía pasearme por los bordes con mis tarros de muestras y ver qué aparecía.
Haré del mundo un antro fantasmal e irrespirable. Volveré histérica a cuanta criatura se agita.
De la ruda labor del brazo vivimos todos, los ignorantes y los sabios. De la cómoda labor de éstos, vive el que puede. No llegan los frutos de su ciencia a la multitud ineducada y zafia; no llegan sus espléndidas luces al fondo del pozo minero, al antro industrial, a la covacha miserable del asalariado
La vida humana se parece a un camino cuya salida es un precipicio horroroso; nos advierten de ello desde los primeros pasos; pero el decreto está ya pronunciado: es preciso adelantar siempre sin poder retroceder.
Lo peor que puede hacerse es cruzar el precipicio en dos saltos.
No tengamos envidia de los que están encaramados, por que lo que nos parece altura es despeñadero