Tontos, piensan que no sé el camino que estoy tomando. Si me encuentras en él dudando, es simplemente porque sé que camino escogeré
El matrimonio no es el cielo ni el infierno, es simplemente el purgatorio
Para que al oponente se someta a nuestra voluntad, debemos colocarlo en una tesitura más desventajosa que la que supone el sacrificio que le exigimos. Las desventajas de tal posición no tendrán que ser naturalmente transitorias, o al menos no tendrán que parecerlo, pues de lo contrario el oponente tendería a esperar momentos más favorables y se mostraría remiso a rendirse.
El hombre es naturalmente crédulo, incrédulo; tímido, temerario.
El buen orden resulta espontáneamente cuando se dejan las cosas a sí mismas.
El dinero no es una invención estatal ni el producto de un acto legislador. La sanción o aprobación por parte de la autoridad estatal es, pues, un factor ajeno al concepto del dinero. El hecho de que unas determinadas mercancías alcancen la categoría de dinero surge espontáneamente de las relaciones económicas existentes, sin que sean precisas medidas estatales.
En un tiempo como el de ahora, en el que tan fácilmente se desprecia a los mayores, creo que soy un ejemplo muy bueno. Entre los 60 y los 84 he hecho una obra. Por tanto ¡ojo con los viejos!
Siempre es bueno en filosofía plantear una pregunta en lugar de dar una respuesta a una pregunta. Pues una respuesta a una pregunta filosófica fácilmente puede resultar incorrecta; no así su liquidación mediante otra pregunta.