(..) Me di cuenta también de que sólo estaba en la Tierra para una breve visita. Estoy aquí por una única vez y no habrá retorno. Por esa razón comencé a escribir.
Todo lo que estimula nuestra vida, trayéndonos calor, frío, tristezas, es breve y es saludable. ¡Sopórtalo, entonces, como lo hace el sabio!
La lealtad es el camino más corto entre dos corazones
Si el desempeño se queda corto ante las expectativas, el cliente queda insatisfecho. Si el desempeño coincide con las expectativas, el cliente queda satisfecho. Si el desempeño excede a las expectativas, el cliente queda muy satisfecho y encantado.
Sabe que escribo lentamente. Esto se debe sobre todo a que no quedo satisfecho hasta que no consigo decir todo cuanto me sea posible en unas pocas palabras, y escribir de modo conciso lleva mucho más tiempo que hacerlo en extensión.
Cuando tengas 80 años, y en un momento tranquilo de reflexión, narrando sólo para ti la versión más personal de tu historia de vida, el relato que será más conciso y significativo será la serie de elecciones que hayas hecho. Al final, somos nuestras elecciones
Para escribir este libro he usado el lenguaje mesurado y sobrio del testigo, no el lamentoso lenguaje de la víctima ni el iracundo lenguaje del vengador: pensé que mi palabra resultaría tanto más creíble cuanto más objetiva y menos apasionada fuese; sólo así el testigo en un juicio cumple su función, que es la de preparar el terrero para el juez. Los jueces sois vosotros.
Y aquel que irá a la cama, sobrio lo hará Con la hoja de octubre cae.
Lo que nos hace llamar con el nombre de juicio final al juicio universal, es sólo nuestra concepción del tiempo; en realidad se trata de un juicio sumario
En este final de siglo, la enfermedad de Occidente es la de la abundancia: Tener todo lo material y haber reducido al mínimo lo espiritual
Las vidas de la mayoría de la gente están dirigidas por el deseo y el miedo. El deseo es la necesidad de añadirte algo para poder ser tú mismo más plenamente. Todo miedo es el miedo de perder algo y, por tanto, de sentirte reducido y de ser menos de lo que eres. Estos dos movimientos oscurecen el hecho de que el Ser no puede ser dado ni quitado. El Ser ya está en ti en toda su plenitud, ahora.
Todo curiosamente se va ajustando, serenando. Las incógnitas sombrías que se alzaron al comienzo del viaje se han ido despejando hasta llegar al escueto panorama presente.
La voluntad, es el poder del deseo cuando está concentrado y sostenido
Esto es lo que ha sucedido a lo largo de la historia de la humanidad. Una y otra vez, la riqueza y el poder se han concentrado en manos de unos pocos que consolidan y perpetúan su control a expensas de la mayoría.
Tu hogar es tu refugio, pero no acabes encerrado en él
Es la soledad de estar encerrado en la habitación que se llama uno mismo, ahora por fin lo entiendo. Que uno mismo es una celda dentro de la cárcel, y que esta celda siempre será distinta de las demás celdas, y por eso siempre estará sola, y siempre estará dentro del edificio de la cárcel, pues forma parte de él.