Vamos por este mundo como si tuviéramos uno de repuesto en nuestra maleta.
Al fin miramos a nuestro alrededor, consultamos nuestras conciencias, levantamos nuestras frentes, sacudimos nuestro letargo, nos inspiramos en nuestras convicciones, dirigimos los ojos hacia la bandera de la patria, y el pueblo ha recuperado su dignidad y se halla dispuesto a sostenerla, aleccionado por el pasado.
El otro día pillé a mi hija escuchando a Kylie Minogue. Todavía no me he recuperado del shock. La mandé a su cuarto y le dije: pequeña, no salgas de ahí hasta que hayas escuchado The White Album al menos tres veces, necesitas desintoxicarte.
La vida social es un continuado concurso abierto entre los hombres para medir sus aptitudes con ánimo de ser preferidos por la mujer.
Las facultades intelectuales resisten un esfuerzo mayor y más continuado durante la juventud y hasta los treinta y cinco años; pasado este periodo, su vigor empieza a declinar, aunque gradualmente.
Pero si me es posible expresar, al cabo de tanto tiempo, lo que pensaba entonces, diré que estaba diez veces más asustado por haber abandonado mis resoluciones y haber retomado mis antiguas convicciones, que por el peligro de muerte ante el que me encontraba.
Nosotros no necesitamos para defendernos esas armas de destrucción masiva, lo que hemos modernizado son las tácticas, el papel del hombre, del combatiente individual, de los combatientes coordinados, de qué forma, con qué tácticas, con qué armas neutraliza lo más poderoso que pueda tener un adversario.
Los que matan a una mujer y después se suicidan debían variar el sistema: suicidarse antes y matarla después.
Dios es capaz de crear partículas de materia de distintos tamaños y formas... y quizás de densidades y fuerzas distintas, y de este modo puede variar las leyes de la naturaleza, y hacer mundos de tipos diferentes en partes diferentes del universo. Yo por lo menos no veo en esto nada contradictorio
Cualquier profesor que pueda ser sustituido por una máquina, debería ser sustituido por una máquina
Estas sensaciones formaban un tejido que me había arrancado la carne y había empezado a ser sustituido por otras visiones, por nuevas vivencias.
El ajedrez es uno de los medios que tenemos para salvar la cultura, como el latín, el estudio de las humanidades, la lectura de los clásicos, las leyes de la versificación, la ética. El ajedrez es hoy reemplazado por el fútbol, el boxeo o el tenis, que son juegos de insensatos, no de intelectuales.
No hay medio de averiguar lo que un individuo es capaz de hacer sino dejándole que pruebe, y el individuo no puede ser reemplazado por otro individuo en lo que toca a resolver sobre la propia vida, el propio destino y la felicidad propia.