Cualquier persona que se ha visto seriamente comprometida en el trabajo científico de cualquier tipo se da cuenta de que en las puertas de entrada del templo de la ciencia están escritas las palabras: debes tener fe. Es una virtud que los científicos no pueden prescindir.
La base de nuestra civilización está en la libertad de cada uno, en sus pensamientos, en sus creencias, sus opiniones, su trabajo y sus ocios
La historia de la arquitectura es la historia del hombre en su labor de organizar y dar forma al espacio.
El mecánico inteligente, comprometido con su trabajo, interesado en hacerlo bien y que encuentra satisfacción en su labor manual, tratando con afecto genuino sus materiales y herramientas, está comprometido artísticamente.
Oír o leer sin reflexionar es una ocupación inútil.
El exilio es parte de mí. Cuando vivo en el exilio llevo mi tierra conmigo. Cuando vivo en mi tierra, siento el exilio conmigo. La ocupación es el exilio. La ausencia de justicia es el exilio. Permanecer horas en un control militar es el exilio. Saber que el futuro no será mejor que el presente es el exilio. El porvenir es siempre peor para nosotros. Eso es el exilio.
Concebir una idea es noble, ejecutar la tarea es servil.
El teatro épico le opone a la obra de arte dramática total el nuevo concepto de laboratorio dramático, al retomar de manera nueva la más vieja tarea del teatro: exponer lo presente. Y, en el centro de sus experimentos, figura el ser humano en nuestra crisis.
Aunque la literatura produzca desechos, cuando menos intenta educar a su hombre. El asunto está en escucharse. Todos, o casi todos los oficios son oficios de desechos. La literatura es uno de los raros ejercicios que exigen del hombre una voluntad singular, una conducta de existencia que retrasa el progreso de una mediocridad que nos es natural.
Yo no viajo para ir a alguna parte, sino por ir. Por el hecho de viajar. El asunto es moverse.
Keynes sabía muy bien que la política económica fascista nunca podría haber triunfado a largo plazo sin guerra, ocupación y explotación.
El peligro que bordea más de cerca este carácter nacional es lo frívolo o, con expresión cortés, lo ligero. Cosas importantes son tratadas como bromas, y pequeñeces sirven para una ocupación seria.
No creo en la historia porque la historia la hacen los hombres y cada hombre tiene su pasión favorable o desfavorable.....Yo no creo más que en una cosa: en mi conciencia y esa conciencia me dice que he cumplido con mi deber
Un samurái no trabaja sólo para comer, no es un esclavo de la comida. Vive para su vocación, para el deber y el servicio.
Yo que siempre me había dedicado a los libros sin pretensión académica, con un estilo libre y poco respetuoso, ahora me veo realizando trabajos de erudición, libros o artículos que piden una dedicación más contenida y notas a pie de página.
Mi trabajo es a dedicación plena
El acierto está en la moderación; y fuera de ella no hay felicidad de ninguna clase. ¡Cuánto más mérito hay en dominarse a sí mismo que en dominar a los demás! El que triunfa de sus pasiones, ha triunfado de sus enemigos. Virtudes ha menester el que gobierna, ni cólera de fuerza
Es menester reír aún sin haber encontrado la felicidad, no sea que muramos sin haber reído nunca.