Yo creo en un alma inmortal. La ciencia ha demostrado que nada se desintegra en la nada. La vida y el alma, por lo tanto, no puede desintegrarse en la nada, y por lo tanto son inmortales.
Es un hecho demostrado en todo el mundo que el aumento brusco del precio de los alimentos genera malestar político e inestabilidad social en las ciudades.
Vivir las cosas con la emoción de que cada hecho que me ha acontecido, he mostrado mi sinceridad y he mostrado mi honestidad para con la vida, creo que eso es lo que más me satisface a estas alturas y lo que más me ha impactado.
Porque también es bien sabido que tanto Dios como el diablo han mostrado últimamente con creces, no tener nada de perfectos y sí mucho de torpes, se les ve a menudo llegar tarde al teatro de sus operaciones.