Cuando llegue el momento, quiero morir en la cocina. Sola en un lugar frío, o junto a alguien en un lugar cálido, me gustaría ver claramente mi muerte sin sentir miedo. Creo que me gustaría que fuese en la cocina.
La realización espiritual consiste en ver claramente que no somos lo que percibimos, experimentamos, pensamos o sentimos; que no podemos encontrarnos en todas esas cosas que vienen y se van continuamente. Buda fue quizás el primer ser humano en ver esto claramente, de tal manera que anata (la ausencia del yo) se convirtió en uno de los puntos centrales de su enseñanza.
Como te dije, viajar es bueno, y a mí me gusta jugar con las cámaras y estar al aire libre. La realidad no es exactamente lo que era la canción al comienzo, pero la canción no es mala.
Un flirteo es como una pastilla; nadie puede predecir exactamente sus efectos secundarios
Aunque no es exacto lo que decía Kant: No se aprende filosofía, sólo se aprende a filosofar, resulta absolutamente cierto que sólo se aprende filosofía poniéndose a filosofar.
Lo contrario de la hipérbole es el trabajo: exactitud, reflexión, precisión. Es dificil hacer del idioma un instrumento exacto y dúctil; y es fácil salir del paso con un superlativo que no dice nada.
Aunque parezca una paradoja, no rara vez sucede que, aquéllos que se llaman a sí mismos hijos de la Iglesia, son precisamente los que mayor confusión siembran.
¡Que precisamente con ayuda de espadas alemanas, de sangre y valor alemanes haya hecho la Iglesia su guerra de mortal enemistad a todo lo aristocrático que existe en la tierra!
Nadie puede pensar lo que quiere ni hacer pensar a otro lo que a él se le antoje. Lo único que puede hacerse es observar atentamente a una persona; generalmente se puede decir luego con exactitud lo que piensa o siente y, por consiguiente, también se puede predecir lo que va a hacer inmediatamente.
¿Cuántos años me golpean de pronto, desgarrándome, fulminándome al revivir con toda la contundencia de lo que está mal hecho el día en que mi moto me hizo conocer la decepción y el miedo y la vergüenza? Era una scooter de color vino tinto y hoy no puedo precisar con exactitud en qué oscuro garaje o en qué manos o en qué lugar de mi memoria se extravió