Obviamente, la compostura de un programa, la da la voz que sale al aire: de un locutor, animador, comentarista, periodista, etc. Esta voz no necesariamente tiene que destacarse por ser microfónica, sino por ser lo suficientemente clara, con buena tonalidad, animada y con buen ritmo
La crítica tiene que limitarse a comparar y contrastar un hecho no con la idea, sino con otro hecho.
Lo publicado es simplemente mentira, eramos cuatro personas y nadie nos ha llamado para contrastar la información
La escritura permitió registrar los acuerdos, las órdenes y las leyes. Permitió que los estados alcanzaran mayores dimensiones que las ciudades. Hizo posible cobrar conciencia de la continuidad histórica. Con ella, los mandamientos del sacerdote o del rey y la impronta de su sello podían llegar más lejos que sus ojos, y su voz, sobrevivir a su muerte (1922).
La literatura no hace sino registrar los encuentros con la belleza.
A vos os corresponde destruir al infame político que convierte al crimen en virtud. La palabra político significaba, en su origen primitivo, ciudadano; y hoy, gracias a nuestra perversidad, ha llegado a significar el que engaña a los ciudadanos. Devolvedle, Señor, su antiguo significado.
La igualdad, para ser democrática, debe significar el derecho de cada uno a escoger y gobernar su propia existencia, el derecho a la individuación contra todas las presiones que se ejercen en favor de la moralización y la normalización.
Traten de verse a sí mismos, porque no se conocen. Deben darse cuenta de este riesgo; el hombre que trata de verse a sí mismo puede ser muy infeliz, porque verá muchas cosas malas, mucho que querrá cambiar, y ese cambio es muy difícil. Es fácil empezar, pero una vez que hayan abandonado su silla, será muy difícil conseguir otra, y esto puede causar una desdicha muy grande.
El mayor infortunio del hombre de letras no es quizá el hecho de ser víctima de las intrigas y la envidia de sus colegas y el verse despreciado por lo hombres poderosos, sino el verse juzgado por los necios.
Los homosexuales frecuentemente traen a colación el tema de que los matrimonios heterosexuales viven una vida de vergüenza. Pero no veo ningún objetivo en sacar a los Clinton a relucir en esto.
El hombre dado a lo sensible se rie a menudo cuando no hay de qué reírse. Su bienestar interior sale a relucir sea cual sea el móvil que lo estimule.