Tenemos todo el tiempo del mundo para ganar este juego y también para destruir a los españoles. (Al avistar la Armada española, el 20/7/1588 mientras jugaba a los bolos)
Todas las ideas tienen alguna realidad mientras estoy pensando en ellas. (...) Ellas iluminan el espíritu, o se le dan a conocer; algunas incluso lo asombran, o hacen que él las sienta, y todo ello de mil maneras distintas.
Y qué bueno hubiera sido encontrarnos algún día para entregarnos cuentas de lo andado, para mirarnos a los ojos por lo menos una vez más en la vida, y arrancarnos -¿quién sabe?- las flores que entretanto nos hubieran crecido para el otro en el propio corazón.
Él no quería ir al médico. No noto nada. No me duele nada. Y entretanto los ganglios linfáticos ya tenían el tamaño de un huevo de gallina. Le metí a la fuerza en un coche y lo llevé a la clínica. Lo mandaron al oncólogo. Un médico lo examinó, llamó a otro. Mira, otro de Chernóbil. Y ya no lo dejaron marchar.
Los cantantes de música pop son las personas que querían tomar lecciones de canto, pero nunca encontraron el tiempo para hacerlo porque en el ínterin se han convertido en famosos.
Y entre tanto que tengo, no encuentro razón suficiente para olvidarme de ti.
Gracias le doy a la Virgen, gracias le doy al Señor, porque entre tanto rigor y habiendo perdido tanto, no perdí mi amor al canto ni mi voz como cantor.