Hay una delgada línea entre el genio y la locura. He borrado esa línea.
El tiempo ha borrado todo en mi corazón cada recuerdo que dejó el desamor, me crecen las alas desde la raíz porque creo ciegamente en ti. No hay nada que me pueda vencer si te tengo detrás de la piel, me vas llenando de luz que va creciendo hacia el sur. Sin mirar atrás intento volar no hay nadie que pueda destruir mi fe me basta mirarte para enamorarme otra vez.
No soy de aquí ni soy de allá, y soy canalla desde mi más tierna edad.
¿Quiénes van a hacer la revolución social, sino los estafadores, los desdichados, los asesinos, los fraudulentos, toda la canalla que sufre abajo sin esperanza alguna? ¿O te crees que la revolución la van a hacer los cagatintas y los tenderos?
Es inútil, no tiene sentido, incluso es despreciable dar por perdida a la humanidad.
Ser inculto en el modo de comer es despreciable ya que indica una falta de conocimiento básicos extensibles a otros campos.
Cuando los nazis sacaron a el judaísmo de la cultura lo que les quedaba era un esqueleto raquítico infame que no representaba era nada
Artículo tercero. — El lugar maldito en que el cristianismo ha incubado sus huevos de basilisco será arrasado, y, como lugar infame de la tierra, constituirá el terror de toda la posteridad. En él se criarán serpientes venenosas.
Aquí te pillo aquí temazo, aquí las patadas, no hay besos ni abrazos
Mi sable nunca saldrá de la vaina por opiniones políticas.
Eres como una espada de excelente temple, oculta en la oscuridad de la vaina, y cuyo valor es desconocido para el artífice. Por tanto, sal de la vaina del yo y del deseo, para que tu valor se haga manifiesto y resplandeciente ante todo el mundo.