Hay que seguir adelante. Con lo que sea que uno quiera hacer: con la música, el medio ambiente o con los proyectos que uno tenga, hay que hacerlos. Todo cuesta y muchas veces el camino se hace difícil, pero se puede lograr.
Necesitamos un nuevo movimiento ecologista, con nuevos objetivos y nuevas organizaciones. Necesitamos más gente trabajando sobre el terreno, en el medio ambiente real, y menos gente detrás de pantallas de ordenador. Necesitamos más científicos y muchos menos abogados.