El banquero es un señor que nos presta el paraguas cuando hay sol y nos lo exige cuando empieza a llover
Si te digo que va a llover saca el paraguas
Viendo llover, nos quedamos dormidos; viendo llover el cielo azul de un domingo
Encomiéndate a Dios de todo corazón, que muchas veces suele llover sus misericordias en el tiempo que están más secas las esperanzas.