Fue realmente encantador (José Mourinho), llamándome jefe y gran hombre cuando nos tomamos una bebida de después del partido. Pero habría ayudado si sus palabras hubieran estado acompañadas de un buen vaso de vino. Lo que me dio fue disolvente de pintura
No estaría exagerando si dijera que si toda la bebida de licores fermentados fuera abolida, todo tipo de delincuencia pasaría a un cuarto de su valor actual, y el tono del sentimiento moral en el orden más bajo podría ser por tiempo indefinido elevado
Al mesmo gobernador que nos manda en lo presente, a ver si con mi aguardiente nos gobernaba mejor.
También tenía, y eso me encantaba, unos zapatos de tacón alto. Debajo de sus zapatos se leía lo siguiente: No olvides, querido esposo, mi consejo, y evita bares, aguardiente y vino añejo. En tu casa nunca dejes de cenar, y ama a tu mujercita, que así te ha de durar.