Si me preguntaras qué es lo que más quiero sobre la anchura de la tierra, yo te contestaría: a tí, amor mío, y a la gente sencilla de mi pueblo.
Y en cuanto a las mujeres, me estoy afirmando continuamente que son el ancho camino real que conduce a la Divinidad.
Yo le quería decir la verdad por amarga que fuera, contarle que el universo era más ancho que sus caderas, yo le pintaba un mundo real y no uno color de rosa, pero ella prefería escuchar... mentiras piadosas.
Hay un camino en lo alto, visible en los cielos transparentes, llamando la Vía Láctea, que resplandece con brillo propio. Los dioses van por ella a la morada del gran Tonante y su residencia real... Allí los famosos y poderosos habitantes del cielo han sentado sus reales. Esta es la región que podría atraverme a llamar la palatina del Gran Cielo.
En nuestra región eclesiástica hay presbíteros que no bautizan a los chicos de las madres solteras porque no fueron concebidos en la santidad del matrimonio (...) Estos son los hipócritas de hoy. Los que clericalizaron a la Iglesia. Los que apartan al pueblo de Dios de la salvación
De continuo me parecía que iba a encontrar a un ser humano sencillo y sabio que me conduciría a un camino ancho y luminoso.
Yo le quería decir la verdad por amarga que fuera, contarle que el universo era más ancho que sus caderas, yo le pintaba un mundo real y no uno color de rosa, pero ella prefería escuchar... mentiras piadosas.
Remontando el Orinoco, digo, y entrando ya en la zona amazónica, me di cuenta que América es uno de los pocos lugares del mundo donde el hombre del siglo XX, puede convivir con el hombre que corresponde a la era del paleolítico o del neolítico en la historia humana.
Cada ciudad con 800 mil o un millón de habitantes, genera su propia zona prescindible, compuesta por esa gente sin oficio ni beneficio, en el filo de la navaja entre la sobrevivencia y el delito.
Su mente ofrecía la curiosa combinación de humillarse en la región del misterio y de ser muy activa, fría y razonable en la del conocimiento.
Centroamérica será vista como una región unida, en paz y con regímenes democráticos positivos y constructivos, viendo en el futuro un proceso de desarrollo verdaderamente efectivo... La firma de la paz es una buena noticia, no sólo para Guatemala sino para Centroamérica en general.