El arrepentimiento es el remordimiento aceptado
Nada hay tan útil como el arrepentimiento
Solamente tengo que protestar contra la pena de muerte que me imponen porque no he cometido crimen alguno, pero si he de ser ahorcado por profesar ideas anarquistas, por mi amor a la libertad, a la igualdad y la fraternidad, entonces no tengo inconveniente... Lo digo en alto: dispongan de mi vida
Y no disculparse del exceso cometido en la embriaguez de la cólera, es más insensato aún que cometerlo. Es el orgullo sosteniendo la estupidez
Cuando estamos señalando al terrorismo en el mundo y particularmente al terrorismo que se gesta en la guerrilla y los 'paras', tenemos que hacer nuestro propio acto de contrición y mirar también el terrorismo que se gesta desde el Estado con las desapariciones forzosas, las torturas, los inocentes en las cárceles, la violación de los derechos humanos
El siglo se muere y no cambia más, está agonizando en cualquier hospital, nosotros tenemos la culpa y hay que solucionarlo. Llamemos al débil y al orador, al mozo, al poeta, al músico, al peón. Llamemos a todos los hombres, que el banquete está listo.
Quizás sea cierto, que los hombres que son meros matemáticos, tienen ciertas deficiencias concretas, pero eso no es culpa de las matemáticas, ya que es igualmente cierto en el caso de cualquier otra ocupación exclusiva.
Mucha buena gente que no sería capaz de robarnos el dinero, nos roba sin escrúpulo alguno el tiempo que necesitamos para ganarlo
Como os explicaba, vuestro escrúpulo es fácil de destruir. Aquí estáis segura de un pleno secreto y el mal no consiste nunca sino en el escándalo que promueve. Sí; el escándalo del mundo es lo que produce la ofensa, y no es pecar, pecar a calladas.
La felicidad ah caminado codo a codo conmigo; pero la fatalidad en absoluto conoce tregua: el gusano esta en el fruto, el despertar en el sueño, y el remordimiento está en el amor: tal es la ley. La felicidad ha caminado codo a codo conmigo.
Ninguna nación mantiene su palabra. Una nación es un gran gusano ciego.
¿Tu a que te dedicas?, y el dice, soy un patrás. ¿Y que es un patrás?, y el dice, pues me pongo detrás del camión y grito ¡patrás, patrás!.
Silencio. ¡Cuán bello el silencio! Pero hay que aquietar este mundo interior. Hay muchos que gritan ahí dentro. El silencio es una conquista. No es el ruido externo lo que nos aturde; es el grito de las pasiones. No es aislarse; es desprenderse; el silencio no es un don sino un fruto difícil. Este silencio físico es apenas un medio para acallar la propia algarabía
Nací para amarte con cada latido de mi corazón...Sí, nací para cuidar de ti, cielo, cada día de mi vida.
Se sintió orgulloso y feliz entonces: feliz de estar con ella, orgulloso de su gracia y su porte señorial. Pero ahora, después de reavivar tantos recuerdos, el primer contacto con su cuerpo, armonioso y extraño y perfumado, produjo en él un agudo latido de lujuria.