Mucha gente piensa, o por lo menos siente, que el que no tiene sus hábitos y sus entusiasmos es un enemigo. A mí me parece lógica la intransigencia tratándose de ideas esenciales.
Aureliano Segundo resolvió que había que llevarla a la casa y protegerla, pero su buen propósito fue frustrado por la inquebrantable intransigencia de Rebeca, que había necesitado muchos años de sufrimiendo y miseria para conquistar los privilegios de la soledad, y no estaba dispuesta a renunciar a ellos a cambio de una vejez perturbada por los falsos encantos de la misericordia.
En la capital de Chile, y en uno de sus principales paseos públicos, existe inmortalizada por el bronce la estatua del prócer de nuestra independencia, General don José Miguel Carrera, cuya misma sangre corre por mis venas, por cuya razón comprenderá usted que ni como chileno, ni como descendiente de aquél, deben intimidarme ni el número de sus tropas ni las amenazas de rigor
El excesivo rigor en el castigo justifica la causa del enemigo.
Estemos siempre a punto para contradecir sin obstinación y dejarnos contradecir sin irritación
Esto se llama perseverancia en una buena causa y obstinación en una mala.
No hace falta que lo admita si eso pone en peligro su sentimiento de masculinidad. Ya sé que ustedes los hombres creen que el tamaño de su tozudez se corresponde con el de sus vergüenzas
No te desalientes, ¡Adelante!, adelante con una tozudez que es santa y que se llama, en lo espiritual, perseverancia.
La fe es el término medio entre la ligereza con que alguno precipitadamente cree y la pertinacia en no creer sino en lo que antes se demuestra por la razón.
Yo no soy pesimista con respecto al porvenir de la cultura, soy escéptico respecto de la perdurabilidad de formas congeladas. Creo que el dogmatismo está condenado a resquebrajarse y reaparecer. La encrucijada del monoteísmo es la pérdida de credibilidad de su discurso.
Hay menos burocracia y menos dogmatismo en el intento de percibir lo que es la astrofísica que lo que es la reforma laboral
En Filosofía habíamos hecho una cosa que llamábamos tomas de cátedra Intentábamos convencer a algunos catedráticos y claro, unos se dejaban y otros no. Algunos se fueron y a otros los echamos El radicalismo siempre me ha fascinado. La agresividad verbal, las explosiones excesivas, todo eso me encantaba.
Yo conozco a ese radicalismo y a los conservadores de Buenos Aires, desde hace cincuenta años, y convengamos que en esos conservadores no han mejorado en nada, no han hecho nada en bien de la provincia. Hace cincuenta años que los conozco, porque he actuado allí. Tenían a su servicio matones y urnas de doble fondo. Yo rompí una en Morón. Hoy se preparan para usar las mismas armas.
La gloria es una incomprensión y quizá la peor.
La situación sobre nuestra Tierra es paradójica. Las interdependencias se han multiplicado. La conciencia de ser solidarios con su vida y con su muerte liga desde ahora a los humanos. La comunicación triunfa; el planeta está atravesado por redes, faxes, teléfonos celulares, módems, Internet. Y sin embargo, la incomprensión sigue siendo general.
Otra cosa, hay que recalcar que las Fuerzas Armadas no están contra el pueblo, sino que están contra la hambruna que estaba causando el gobierno marxista del señor Allende, contra las colas, contra el hambre, contra la pobreza, contra la miseria, contra el sectarismo a que nos estaba llevando el señor Allende, mientras él se satisfacía con fiestas y parrandas en la casa...