Todo lo imperecedero es mera alegoría. Y los poetas mienten demasiado.
Estamos aquí para tornar imperecedero lo perecedero; y esto puede suceder sólo si se saben valorar ambas cosas.
Los prejuicios son lo más perdurable que existe en el espíritu humano.
El buen arquitecto dejará algo de valor perdurable y contribuirá a mejorar el estilo de vida del cliente y el aspecto del barrio. Ni el arte ni la tecnica separados pueden tanto como cuando actúan combinados.
La doctrina judía del marxismo rechaza el principio aristocrático de la naturaleza y antepone la cantidad numérica y su peso inerte al privilegio sempiterno de la fuerza y del poder