No es extraño que los verdaderos mensajes de los humanistas procedan la mayoría de las veces de los medios minoritarios, o de hombres ocupados de las mentes minoritarias de la humanidad; pero siempre hay fanáticos...
Dos leyes contrarias paracen estar luchando hoy entre sí. Una es una ley de sangre y de muerte que imagina sin cesar nuevos medios de destrucción y obliga a las naciones a estar constantemente preparadas para el campo de batalla. La otra es una ley de paz.