Las ligas y los tratados están bien entre los políticos. Pero no pueden producir la paz, a menos que la gente misma sea quien la desee. Nosotros tratamos de imbuir en la próxima generación el espóritu de amistad, camaradería y amistad, que es la verdadera fase para la paz del mundo.
Sólo una gran inteligencia es capaz de insuflar un sentido lógico a ideas insensatas
La pena de muerte se convierte en un espectáculo y en un motivo de compasión desdeñosa para algunos; ambos sentimientos ocupan más el ánimo de los espectadores que no el saludable temor que pretende inspirar la ley.
Para pedir limosna hay que ir limpio, pero maltrazado. El pobre que va decentemente no causa pena y el que va sucio da asco. Hasta la compasión se ha de inspirar con mesura
Un hombre escribe para expulsar el veneno que ha acumulado debido a su estilo de vida falso. Está intentando recapturar su inocencia, pero todo lo que logra hacer (escribiendo) es inocular el mundo con un virus de su desilusión. Ningún hombre pondría una sola palabra en un papel si tuviera el coraje de vivir aquello en lo que creía.
La crisis pasará, por supuesto, pero lo hará a costa del sufrimiento de todos nosotros, porque con la mitad del dinero que se pretende inyectar para que un banco esté lleno, se podría evitar el recorte en lo más importante que hay: la educación y la sanidad.
Quien ha experimentado a Dios puede describir parte de su vivencia en lenguaje simbólico, pero no puede trasmitir a otra persona lo que ha vivenciado. La mística da lugar al pensamiento, pero no es reducible a él.