Llevo 20 años en este deporte y si uno mira atrás siempre se arrepiente de algo, hay triunfos y derrotas. Me arrepiento enormemente de haber perdido a una estrella como Fernando (Alonso), uno de los grandes pilotos, porque queremos tener siempre a los mejores pilotos posibles en nuestro equipo y él lo es
No nos vimos nunca pero no importaba, mi hermano despierto mientras yo dormía, mi hermano mostrándome detrás de la noche su estrella elegida
Descubrí que no soy disciplinado por virtud, sino como reacción contra mi negligencia; que parezco generoso por encubrir mi mezquindad, que me paso de prudente por mal pensado, que soy conciliador para no sucumbir a mis cóleras reprimidas, que sólo soy puntual para que no se sepa cuan poco me importa el tiempo ajeno. Descubrí, en fin, que el amor no es un estado del alma sino un signo del zodiaco.
Máximo signo de final es el principio.
He tocado con mucha gente diferente, y un buen día tuve la fortuna de conocer a Mick y a Keith y entrar en los Rolling Stones. Ésta es la música que yo hago, los Rolling Stones soy yo, son mi vida; el resto son pasiones e intereses alternativos.
¡Qué instable es la fortuna en esta vida! Apenas nos muestra un día su rostro favorable para mirarnos con ceño muchos meses.
Si acaso estamos enfermos de maldad, fuera de camino, tenemos un título más para ser amados por el Señor
Pero ¿acaso no sentimos que quien no ve allí un problema está ciego ante algo importante; a decir verdad ante lo más importante? ¿No me gustaría acaso decir que ese tal vive precisamente ciego, como un topo, y que si pudiera ver, vería el problema?
Solidario por predestinación y por oficio. Solidario por atavismo, por convencionalismo. Solidario a perpetuidad. Solidario de los insolidarios y solidario de mi propia solidaridad
Cuando el sentimiento de melancolía bovina, de irremediable fatalismo se transforma en un lacerante sentido del horror, el arbusto del opio del optimismo acude en ayuda de los hombres