Afortunadamente había comprado uno de esos abrigos de pelo de camello llamados machlah que cubren a un hombre desde la espalda hasta los pies; con mi barba ya larga y un pañuelo enrollado alrededor de la cabeza, el disfraz estaba completo.
El camello es el animal que más tiempo puede permanecer sin beber. La prueba es que no he visto jamás beber a un camello. Es más, ni siquiera he visto nunca a un camello.