Cuando hay clase, la velocidad es una minucia
Las heridas morales tienen la particularidad de que se ocultan, pero no se cierran; siempre dolorosas, siempre prontas a sangrar cuando se les toca, quedan vivas y abiertas en el corazón
Me gusta la gente inteligente, la gente sensible, perceptiva, pero la inteligencia es una parte más, no una particularidad en especial. Hay mucha gente que cree que atender el cuerpo es una cosa estúpida, que bailar es perder el tiempo. Yo creo que atender el cuerpo es igual que atender la mente: es tan elevado lo uno como lo otro.
El crimen no es más que el pormenor de lo que es, al por mayor, la ley penal.
Al estar enamorados de una mujer, simplemente proyectamos en ella un estado de nuestra mente; por consiguiente, lo importante no es el valor de la mujer, sino la profundidad del estado.
La profundidad de una persona no se mide por la huella que deja al pasar sino por la distancia que abarca su mirada.
Cuando hay clase, la velocidad es una minucia
La caricatura, el humor, tienen la particularidad que no necesitan una decodificación: son un lenguaje popular, fácilmente entendible.
Me gusta la gente inteligente, la gente sensible, perceptiva, pero la inteligencia es una parte más, no una particularidad en especial. Hay mucha gente que cree que atender el cuerpo es una cosa estúpida, que bailar es perder el tiempo. Yo creo que atender el cuerpo es igual que atender la mente: es tan elevado lo uno como lo otro.
El crimen no es más que el pormenor de lo que es, al por mayor, la ley penal.
Si bien uno tiene que sincerarse demasiado en la literatura y escribir lo que está dentro de sus vivencias, de lo que padece y lo que goza, pienso que me han ajustado al norte por comodidad: para mí sólo se trata de una invención, porque no soy un escritor enteramente realista; hay una recreación en las atmósferas, pero no una precisión por captar el espíritu.
Sigo el camino que me marca la Providencia con la precisión y seguridad de un sonámbulo
..., y considerando cuánta profundidad de filososofía moral se requiere en quienes suministran el poder soberano, estoy a punto de creer que esta labor más es tan inútil como la República de Platón.
La profundidad de los políticos rara vez pasa de la superficie.