Para consultar la Wikipedia hay que ser un ceporro o un agarrado
Francamente, estaba horrorizado con la vida, con lo que un hombre tenía que hacer simplemente para comer, dormir y mantenerse vestido. Entonces me quedaba en la cama y bebía. Cuando bebía el mundo aún estaba allí afuera, pero por el momento no te tenía agarrado del cuello.
El primer francés que se comió un caracol no era, ciertamente, un epicúreo, sino un hambriento
El amor que se alimenta de regalos siempre está hambriento
No es licito querer devolver y restituir lo que el amor da: en el mar del amor debe estar ahogado todo instinto de restitución.
Mi cabeza arrancada como la de un feto muerto que debe perderla para que el cuerpo acéfalo nazca a pesar de todo, palpite por unos instantes y muera también, ahogado en sangre, a fin de que la madre se salve y pueda llorar. Después de todo, la guillotina primero ensayó su eficacia cortándole la cabeza, no a los reyes, sino a los cadáveres.