Dar la espalda a la sombra y volver el rostro a la luz, por débil que sea. Busca siempre un camino de salvación, una zona de bienestar, un medio de seguir adelante. Nunca se deja de hallarlos
No escuchar o, lo que es lo mismo, escuchar distraídamente, es como dar la espalda a alguien que nos pide un favor