Este es un momento duro y difícil: es posible que nos aplasten. Pero el mañana será del pueblo, será de los trabajadores. La humanidad avanza para la conquista de una vida mejor
Yo tenía un par de años más que ella, pero nos enamoramos, en el cuarenta y seis nos casamos y en el setenta y tres la perdí. Eso duró mi historia sentimental
El trabajo duro nunca mató a nadie, pero ¿para qué arriesgarse?
¿Cómo es posible, que tanta belleza oculte un corazón duro y lacerado? ¿Por qué le amo, por qué me apoyo, cansado, en su irresistible e indómita fortaleza? ¿Acaso no es el espíritu marchito y fúnebre de un hombre muerto vestido con la ropa de un niño?