Cada vez que se sentía descorazonado se decía que lo que estaba haciendo, por muy incómodo que le resultara, era mejor que quedarse en la anterior situación, sin queso. En lugar de conformarse con que las cosas sucedieran, comenzaba a tomar el control.
Melancolía: manera romántica de estar triste
La sala contigua estaba muy oscura. Los pocos muebles grandes se arracimaban como bultos, como las cestas con los ladrones dentro en Alí Baba. Pensé en lo triste que sería haber recorrido todo el trayecto desde el barrio hasta Briar para que me asesinasen unos ladrones. ¿Y si uno de ellos resultaba ser alguien conocido, uno de los sobrinos de Ibbs? Ocurren cosas así de raras.
Mas cuenta tiene con Dios el desdichado que el feliz.
Las mujeres me han hecho desdichado. Pero la felicidad que he obtenido compensa toda la desdicha. Es mejor ser feliz y desdichado que no ser ninguna de las dos cosas.
Escuchad pues, diligentemente, oh... carísimos, con un ánimo humilde, abatido y desconfiado de sí mismo, al Dios todopoderoso, que os crió, redimió y santificó y os promete de glorificaros en su reino consigo; el cual os habla y enseña en esta santa palabra su voluntad.
De los suspiros algo nace que no es la pena, porque la he abatido antes de la agonía; el espíritu crece olvida y llora: algo nace, se prueba y sabe bueno, todo no podía ser desilusión: tiene que haber, Dios sea loado, una certeza, si no de bien amar, al menos de no amar, y esto es verdadero luego de la derrota permanente.
La marca del demonio ya no será un número, será el sello de algún gigante farmacéutico, que por un mísero beneficio económico permiten que muera África habiendo un antídoto.
¡Ay mísero de mí! ¡Y ay infelice! Apurar, cielos, pretendo ya que me tratáis así, qué delito cometí contra vosotros naciendo; aunque si nací, ya entiendo qué delito he cometido. Bastante causa ha tenido vuestra justicia y rigor; pues el delito mayor del hombre es haber nacido.
Si puedo evitar que un corazón sufra, no viviré en vano; si puedo aliviar el dolor en una vida, o sanar una herida o ayudar a un petirrojo desmayado a encontrar su nido, no viviré en vano.
Una vez entré a mi cuarto una noche en un hotel, y la sábana estaba en el piso, y yo pensé que era un fantasma que se había desmayado así que lo patee