En ese mismo momento, cuando en verdad podíamos decir: Vano es el socorro del hombre, quiso Dios, para nuestra grande y dulcísima sorpresa, abatir la furia del mal, y al declinar la malignidad de éste, y aunque aún había un número infinito de enfermos, cada vez fueron muriendo menos.
No se puede hablar de decadencia española en sentido estricto, porque para decaer hay que caer desde algún sitio y España no ha llegado a cúspide alguna
¿Llegamos a disipar o a disminuir nuestra angustia? Lo cierto es que no podríamos suprimirla puesto que nosotros mismos somos angustia
La revolución proletaria debería arrojar un rayo de bondad para iluminar la triste vida de las prisiones, disminuir las sentencias draconianas, abolir los bárbaros castigos -las cadenas y azotes- mejorar en lo posible la atención médica, la alimentación y las condiciones de trabajo. ¡Es una cuestión de honor!
Dioses cuyo deseo es salvar los audaces navíos y amainar los crueles peligros del ventoso ponto, alisad suavemente el mar y haced vuestra asamblea plácida a mis plegarias; y que, ante mi ruego, el oleaje, apaciguado, no alborote. Una prenda grande y preciada encomiendo a tus profundidades, Neptuno.
Pero ¿Acaso es sensato expresarse con claridad? ¡Oh, cómo me tortura el sol en su cénit! Ella lleva ahora un sombrero de paja y camina algo inclinada, con paso indeciso. La gente insegura puede desconcertar a la gente segura. Es decir, la gente segura convierte en segura a la gente insegura. ¿Tiene de veras el arte la misión de hacer flaquear con las flaquezas? ¡San Sebastián!
Como empresario tienes que aprender muy rápidamente que no hay tal cosa como un fracaso. Mirando hacia atrás en la historia de Virgin, nuestra capacidad para adaptarse rápidamente a los cambios ha ayudado a mitigar los reveses
Aprendamos a aumentar la continencia, a enfrentar la demasía, a templar la gula, a mitigar la ira...
La mentira es usada como anestesia para aplacar el dolor dentro esta sociedad capitalista...
Un extraño impulso me llevó a encaramarme a la amplia losa, apagar la vela y yacer dentro de la caja desocupada.
Creo que parte del problema acá es el Internet, eres anónimo. Es realmente fácil desquitarte con la gente, inclusive si esa no es necesariamente tu intención. Si te estas sintiendo mal con respecto a ti mismo y no tienes el control de tu vida, es extremadamente fácil vomitar verbalmente sobre alguien más, apagar tu computadora e ir a dormir sin tener que ser responsable de ello.
Los niños pobres son los que más sufren la contradicción entre una cultura que manda a consumir y una realidad que lo prohíbe
La llama consume el aire y es alimentada por la leña. El aire es la única condición para el crecimiento de los árboles. La leña, cooperando a consumir el aire, mediante el fuego, lucha contra sí misma y contra su propia fuente; y, sin embargo, el oxígeno del aire subsiste y los árboles no cesan de reverdecer.
Las corrientes, las cascadas y los saltos, son los grandes fenómenos de la vida del arroyo. No siendo todavía bastante fuerte para regularizar completamente la inclinación de su lecho, y minar las bases de la roca, arrasar los salientes de la piedra y reducir a polvo los cantos esparcidos, tiene el arroyo que salvar estos obstáculos saltando por encima o escaparse por los lados.
La deuda es la enfermedad fatal de las repúblicas, la primera cosa y la más poderosa para minar gobiernos y para corromper a la gente.
Jamás perdona el necio si ve la nuez vacía que dio a cascar al diente de la sabiduría.
Imbecilidad. La propiedad de algunos cerebros de no dejarse contaminar por ninguna idea.
Las guerras que tenemos es por ver quién ama más, y los suspiros son la única manera de contaminar (Vente al más allá)
Ocurra lo que ocurra, pensé, la vida continúa igual, y hacemos las mismas cosas, y seguimos celebrando las pequeñas ceremonias anexas a nuestra comida, a nuestro sueño y nuestro asco. No hay crisis capaz de quebrar la corteza de lo habitual.
La vida no podía ser esa cosa que se nos imponía y que uno asumía como un arriendo, sin protestar. Pero ¿qué podía ser?... Debía haber una contraseña, algo que permitiera quebrar la barrera de la rutina y la indolencia y acceder al fin al conocimiento, a la verdadera realidad.
Sé visionario, Mira hacia el futuro desde donde la mayoría de la gente se queda anclada al pasado. Y no tengas miedo de romper tus rutinas. Replantéate constantemente tus métodos de trabajo. Pregúntate siempre: ¿Cómo podría mejorar mi productividad? ¿Cómo podría rebajar más deprisa? ¿Cómo podría conseguir que mis clientes estuvieran más satisfechos?
Le creció entonces en el alma un estremecimiento de dignidad: ya era oficial y no quería rebajar su categoría.
El arte de revolucionar y modificar los estados consiste en socavar las costumbres establecidas retrocediendo hasta sus orígenes para poner de manifiesto su falta de justicia.
Es necesaria la desgracia para socavar ciertas minas misteriosas ocultas en la inteligencia humana; es precisa la presión para hacer estallar la pólvora
Luché contra un lagarto. Peleé contra una ballena. Sólo la semana pasada asesiné a una roca, lesioné a una piedra y hospitalicé a un ladrillo. Soy tan malo que hago enfermar a los medicamentos.
El otro dia luché contra un cocodrilo, peleé contra una ballena, he esposado relámpagos, he encerrado en la cárcel a truenos, yo asesiné a una roca, he herido a una piedra, hospitalizé a un ladrillo, soy tan malo que hago enfermar a la medicina.
No creo en la existencia de razas privilegiadas, creo en los hombres y, sobre todo, creo en los españoles, y por lo que a mí se refiere, creo tener una enorme capacidad para encajar los reveses con la sonrisa en los labios, sin desfallecer nunca. Tengo también defectos, quizá demasiados, pero de resaltar éstos ya se encargarán otros cumplidamente.
Si se ha de escribir correctamente poesía, no basta con sentirse desfallecer en el jardín, bajo el peso concertado del alma o lo que fuere y del célebre crepúsculo o lo que fuere.
Hemos perdido nuestro espíritu en las regiones de lo abstracto y general, al igual que los monjes lo dejan marchitar en el mundo de la oración y la contemplación
Mejor pasar audaz al otro mundo en el apogeo de una pasión que marchitarse consumido funestamente por la vida
Otras veces esa imagen de pareja ejemplar es porque los agresores en público muchas veces tienen un comportamiento hasta excesivamente cuidadoso y cariñoso con su mujer. Lo que intentan es disimular, limar cualquier signo de sospecha