La música encarna sentimiento sin forzar a que se sostengan y se combinen con el pensamiento, como es obligación en la mayoría de las artes y especialmente en el arte de las palabras.
Pasan los años, y cómo cambia, lo que yo siento, lo que ayer era amor, se va volviendo otro sentimiento. Porque años atrás, tomar tu mano, robarte un beso, sin forzar un momento, formaban parte de una verdad.
Jamas en la conduccion politica hay que obligar a nadie, hay que persuadir a todo el que se pueda.
¿Para qué el colegio? para atormentar a los niños, para obligar a los niños de la escuela 1567 a ser esclavos y a ser obreros y ser juniors, para obligar a los niños del Saint George y del Grange a ser gerentes o a ser abogados, no les preguntan qué quieren ser
Al Padre de todas las cosas no se le puede imponer nombre alguno, pues es inengendrado. Porque todo ser al que se impone un nombre, presupone otro más antiguo que él que se lo imponga. Los nombres de Padre, Dios. Creador, Señor, Dueño, no son propiamente nombres, sino apelaciones tomadas de sus beneficios y de sus obras.
Escribir no es imponer una forma de expresión a una materia vivida. La literatura está al lado de lo informe, de lo inacabado... Escribir es un asunto con el devenir, siempre inacabado, siempre en curso, y que desborda cualquier materia vivible o vivida.
Nadie nace perfecto. Para todo el mundo existen posibilidades de mejorarse a sí mismo. Las pruebas y dificultades deben de convertir a uno en un individuo mejor en lugar de crear complejos y constreñir la mente y el corazón.
No tengo la pretensión de ser un escritor. Quien dice escritor dice, casi siempre, novelista y, ¡por Dios!, el misterio del Cuarto Amarillo está lo suficientemente cargado de trágico horror real como para precisar de la literatura. No soy y no quiero ser más que un fiel cronista.
¿Cuántos años me golpean de pronto, desgarrándome, fulminándome al revivir con toda la contundencia de lo que está mal hecho el día en que mi moto me hizo conocer la decepción y el miedo y la vergüenza? Era una scooter de color vino tinto y hoy no puedo precisar con exactitud en qué oscuro garaje o en qué manos o en qué lugar de mi memoria se extravió
La naturaleza de los sonidos es ser invisible, sin contornos precisos, con potencia para interpelar lo invisible o para hacerse mensajeros de los indelimitable.
La televisión, por contra, presenta a sus espectadores una representación de la realidad mucho más formada, sin requerir la colaboración creativa que las palabras siempre han exigido.
Desde entonces Dios ha establecido tal diferencia natural entre el hombre y la mujer, y puesto que vuestra majestad sobresale tanto en sabiduría mientras que yo soy tan inferior en todo sentido a vos, ¿cómo va vuestra majestad a requerir mi opinión en cuestiones religiosas tan complejas?'.
Me es posible mezclar mi aliento al suyo, embriagarme en la contemplación de sus facciones sin que me considere sospechosa de impureza y engaño. Teme que mi seducción le haga violar sus votos. ¡Qué injusto es! Si quisiera excitar su deseo, ¿Le ocultaría con tanto cuidado mis facciones? Esas facciones de las cuales a diario le oigo decir...Se interrumpió y se sumió en sus reflexiones.
Cuando das un paso más allá del sistema del mundo, lo único que haces es excitar un humor inquisitivo que no es posible satisfacer jamás.