Uno de los acontecimientos más memorables de la vida de cada individuo es la terminación de los estudios escolares. Es el momento en que se hace el resumen de la adolescencia y se abren amplias perspectivas en el futuro.
Mi mano izquierda es una escopeta. Con eso bastará. Lo único que me gustaría es anular la cláusula que exige la terminación de la pelea si alguno de los dos cae tres veces en el mismo round (antes de la pelea con Alí, en la que caería tres veces en el último round).
El Yo descarta la ilusión de yo y, sin embargo, sigue siendo yo. Ésa es la paradoja de la autorrealización. En lugar del yo original, la autoentrega perfecta deja un residuo de Dios en el cual el yo se pierde. Ésa es la forma más alta de devoción y entrega y la culminación del desapego.
Me encontré de pronto en la culminación de la dicha del amor y en consecuencia en la cima de mi vida, de mis añoranzas y aspiraciones.
Para mí, Dios es como la cuña que nunca deja que se cierre el mundo y que siempre está generando otra cosa. Pero no tengo idea de quién sea. Es el lugar desde el que merodeando hablo; pero nunca hablaría sobre Dios, intento hablar desde Dios
Que se cierre el Congreso si va a actuar como una escribanía.