Pues si yo quisiera que mi salud fuera una gracia de César, a mí me tocaba ir a implorarla directamente; más no quiero tener nada que agradecer a un tirano en aquello mismo que es injusto, y no puede menos que no serlo, salvando como dueño y señor a los que no era razón dominarse
Porque la serenidad en medio de la desgracia, y la gracia en medio de la tortura, no son sólo resignación; son también actividad y encierran un triunfo positivo.
Ningún juego te hará olvidar: tu alma es una máquina fría, un lúcido registro
En una economía sin trabas, en la que salarios, costos y precios quedan a merced del libre juego de la competencia, las perspectivas de beneficios deciden cuáles serán los artículos que se produzcan, en qué cantidades y cuáles los que no han de producirse en absoluto.
La infantilidad es uno de los caracteres más importantes y, en el más noble sentido del término, más humanos del hombre.