El mayor enemigo del humor es el fundamentalista y el dogmático. Nadie ha visto sonreír a un terrorista o esbozar una sonrisa a un severo conservador cristiano. Generalmente son tan tristes que parecen que fueran a su propio entierro. Basta ver sus rostros crispados. No es raro que sean reaccionarios y hasta violentos.
Descubrí que había que diseñar de nuevo incluso los gráficos tradicionales de la economía si queríamos que la sombría ciencia de la economía se convirtiera en la apasionante disciplina que realmente era.
Usted puede diseñar y crear, y construir el lugar más maravilloso del mundo, pero se necesita gente para hacer el sueño realidad