El hombre más noble a todo se acomoda, aunque no sea obsequioso. El hombre inferior es obsequioso, pero no se acomoda a los demás.
Igual que el mosquito más tonto de la manada, yo sigo tu luz aunque me lleve a morir; te sigo como le siguen los puntos finales a todas las frases suicidas que buscan su fín
La utopía está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y el horizonte se desplaza diez pasos más allá. por mucho que camine, nunca la alcanzaré. Entonces, ¿para qué sirve la utopía? Para eso: sirve para caminar.
Al final a uno lo derrotan siempre. Creo que la derrota es algo inherente a la condición humana, al hecho de vivir y de pelear. por mucho que venzas, siempre al final hay alguien que te derrota, siempre hay un Rocroi, por mucho que triunfes siempre hay un iceberg esperando al Titanic.