La sociedad está compuesta por dos grandes clases: aquellos que poseen más comida que apetito, y los que tienen más apetito que comida
Ya no hay artistas como los de antaño, de aquellos cuya vida y alma eran el instrumento ciego del apetito de belleza, órganos de Dios mediante los cuales se probaba a sí mismo su existencia. Para ellos el mundo no importaba. Nadie supo nada de sus dolores. Se acostaban tristes todas las noches y contemplaban la vida humana con una mirada de asombro, igual que nosotros contemplamos un hormiguero.
¡Oh, dulce concupiscencia de la carne! Refugio de los pecadores, consuelo de los afligidos, alivio de los enfermos mentales, diversión de los pobres, esparcimiento de los intelectuales, lujo de los ancianos. ¡Gracias, Señor, por habernos concedido el uso de estos artefactos, que hacen más que palatable la estancia en este Valle de Lágrimas en que nos has colocado!
La cólera se transforma muy fácilmente en concupiscencia agresiva y la pena, si se la da una oportunidad, se convierte, de modo casi imperceptible, en la sensualidad más deliciosa.
Ni pueblos ni hombres han de ser medrosos que lleguen a tener miedo de sí mismos. En buena hora que la política sea artística, y pocas ciencias requieren tanto arte y mesura y estudio y buen gusto como ella. Pero ha de ser sincera.
Lo que quiero es que la gente llegue a su casa, se siente en su mesa, coma sus frijolitos, sus huevitos y que muy a gusto disfrute de la telenovela.
Normal que no me entiendan los insensibles, con vidas fáciles, creyéndose triunfadores, por el materialismo que exhiben
El materialismo parte de la animalidad para construir la humanidad; el idealismo parte de la divinidad para constituir la esclavitud y condenar a las masas a una animalidad sin salida.