No es menester el arte donde sobra naturaleza. Sobra la afectación donde basta con el descuido.
La frase con alambre de púas, la palabra laboriosamente rara, la afectación intelectual del estilo, son todos trucos divertidos, pero inútiles.
De todas las formas de engañar a los demás, la pose de seriedad es la que hace más estragos.
Quien viaja en un tren y sigue con su carga sobre la cabeza está loco. Si la baja, descubrirá que esa carga también llega a destino. De un modo parecido, no adoptemos la pose de quienes ejecutan la acción: entreguémonos a la fuerza que nos guía.