Se pude estrangular a un hombre, pero sea cual sea su debilidad, no se pude estrangular su dignidad...la dignidad es la conciencia de la existencia, ahí encuentra la fuerza individual los hombres débiles. Si la conciencia de la existencia desaparece, la existencia toma la forma de la muerte.
La voz de uno nunca debe estrangular los pensamientos propios ni ahuyentar los ajenos.
Chau, amor mío, pero el desencanto puede ser tan fuerte por quererte tanto que ni aún la muerte pueda ahogar el llanto de mi soledad.
El peor enemigo del Capitalismo es el Capitalismo. Va a caer por él solo porque es una filosofía de vida que no es sostenible... El capitalismo se va a ahogar solo en su codicia.
En todas las lenguas del mundo hay un mísmo dicho: ojos que no ven, corazón que no siente. Pues yo afirmo que no hay nada más falso que eso; cuánto más lejos, más cerca del corazón están los sentimientos que intentamos sofocar y olvidar
He ordenado que las tropas del Ejército se dirijan a Valparaíso para sofocar este intento golpista
Si uno reflexiona se atasca. Entonces uno llegará a la conclusión de que no tiene sentido, pues la infancia ha quedado atrás, y lo que ha terminado fue como fue, ya es demasiado tarde para cambiar nada. En su lugar hay que dejar que las palabras se asienten en tu interior: Nunca es demasiado tarde para tener una infancia feliz.
Tanta prisa tenemos por hacer, escribir y dejar oír nuestra voz en el silencio de la eternidad, que olvidamos lo único realmente importante: vivir.
Hay que abandonar toda idea de evolución natural; no existe semejante cosa. Nada prueba que, desde el punto de vista biológico, el hombre esté más avanzado que el microbio.
Te he dicho que he perdido la fe contestó Stephen pero no que haya perdido el respeto a mí mismo. ¿Qué clase de liberación sería esa de abandonar un absurdo que es lógico y coherente para abrazar otro ilógico e incoherente?
Las palabras más ricas, menguante aurirrosado de la luna, se me van por el lago, verticales, en una temblorosa exaltación, a colgarse de ti. Que los poetas -que todo lo sueñan- y los amantes -que lo tienen todo- son aquí tus mendigos humillados.