La curiosidad ingenua que, desarmada, está asociada al saber del sentido común, es la misma curiosidad que, al hacerse crítica, al aproximarse de forma cada vez más metódicamente rigurosa al objeto cognoscible, se vuelve curiosidad epistemológica. Cambia de cualidad pero no de esencia.
La escritura, tal como la concibo, no tiene un territorio propio. El acto de escribir no es más que el acto de aproximarse a la experiencia sobre la que se escribe; del mismo modo, se espera que el acto de leer el texto escrito sea otro acto de aproximación.
Bajo el sol brumoso del frío, el sol del calor, las orillas se difuminan, el río parece juntarse con el horizonte. El río fluye sordademente, no hace ningún ruido, la sangre en el cuerpo. Fuera del agua no hay viento
El sabio es el único que escapa a las leyes del género humano, todos los siglos le sirven como a un dios: ¿se trata del pasado? Su recuerdo lo abraza. ¿del presente? Lo utiliza. ¿del futuro? Lo prevé. Así se prolonga su vida, al juntarse en uno solo todos los tiempos.
Para luchar por la libertad no hacen falta odios; sin odio se abren los tuneles, sin odio se ponen diques a los ríos, sin odio se hiere la tierra para sembrar el grano, sin odio pueden aniquilarse a los despotismos, puede llegarse a la acción más violenta cuando sea necesaria para la emancipación humana
En la medida en que realmente pueda llegarse a superar el pasado, esa superación consistiría en narrar lo que sucedió.
Mucha gente importante me invita a ir a esta o aquella otra ciudad. Yo les respondo que no voy porque sólo me verían a mí, a un hombre como cualquier otro. Yo les invito a venir a Maranello porque aquí ellos pueden ver cómo hacemos nuestros coches y ellos también pueden hablar con mis colaboradores
Siempre me he dicho a mí mismo que quería retirarme en lo más alto. Si me hubieras dicho hace ocho meses que estaría jugando en la liga francesa, ganado el título de Liga y acabando así, habría dicho que no, pero tuve la oportunidad de venir la PSG y siento que ahora es el momento adecuado
Disciplina es pagar el precio para traer esa visión a la realidad. Es abordar los hechos duros, pragmáticos y brutales de la realidad y hacer lo que haga falta para que ocurran las cosas. La disciplina surge cuando la visión se une al compromiso.
Para la mayoría de la gente, fracaso significa abordar y ser rechazado. Mi definición de fracaso, en cambio, es abandonar, tirar la toalla o ni siquiera llegar a abordar.
No podía sentirla en la oscuridad ni su voz podía rozar su oído. Esperó unos minutos, tratando de oír. No se oía nada: la noche era de un silencio perfecto. Escuchó de nuevo: perfectamente muda. Sintió que se había quedado solo.
Nuestra pasión es rozar el borde vertiginoso de las cosas. Sigue siendo lo que ha sido siempre: el límite estricto entre lealtad y deslealtad, fidelidad e infidelidad, las contradicciones del alma.