Ganan más vendiendo un kilo de disco que uno de hachís. El disco no tiene riesgo, si viene la policía, como mucho hay que recoger y esperar 10 minutos. Los inmigrantes ya saben que España es un chollo. Pueden vender en la calle y no les pasará nada. Cada vez vienen más.
No encontrarás ningún disco de oro en ningún sitio de mi casa. Porque eso hace que te sientas agasajado: mira lo que he hecho. Pero siempre quiero sentir que no he hecho todo.